Haz un jabón casero para cuidar tu piel sin químicos ni conservantes

Los remedios caseros representan un aspecto fundamental a la hora de cuidarnos de diversos males cuando estamos cortos de dinero o cuando no podemos apersonarnos a alguna farmacia por diversos factores. Lo cierto es que para darte un baño reparador puedes utilizar un excelente jabón de elaboración casera.

Con el avance de la tecnología y la posterior divulgación de la información, donde tenemos a mano la receta necesaria para lograr lo que nos propongamos, debemos decir que nada se comparar a la experiencia de crear nuestros propios elementos de higiene.

 A continuación, vas a crear tu propio jabón casero de lavanda, perfecto para cuidar tu piel y relajar tu mente durante el baño. La diferencia con los jabones comerciales es clara, ya que estos contienen químicos agresivos que pueden irritar y resecar la piel. Aquí es donde los jabones caseros, especialmente los elaborados con ingredientes naturales como la lavanda, marcan una gran diferencia positiva. Para ello debes incluirla por sus propiedades que ayudan a reducir el estrés y la ansiedad. De esta forma deleitarás tus sentidos y contribuirás a una experiencia de baño más relajante y terapéutica. Esto es todo lo que necesitas para su preparación:

• 400 gramos de aceite de coco
• 300 gramos de aceite de oliva
• 100 gramos de aceite de almendras
• 390 gramos de agua destilada
• 150 gramos de soda cáustica
• 30 gramos de aceite esencial de lavanda
• Flores de lavanda secas o frescas 
• Colorante morado (opcional)
• Guantes, cubrebocas, lentes protectores y ropa de manga larga

Para comenzar con la preparación de tu jabón casero, es necesario pesar cuidadosamente todos los ingredientes ya que la precisión es clave para obtener un resultado exitoso y seguro y disolver la soda en el agua, revolviendo con una palita de madera y deja reposar por 5 minutos. A continuación, mezcla los aceites de coco y oliva, y luego añade la solución de sosa. Bate hasta obtener una mezcla homogénea.

A continuación, incluye el aceite de almendras, el aceite esencial de lavanda y el colorante si decides usarlo. Mezcla en moldes, agregando flores de lavanda para decorar y deja reposar en un lugar fresco y seco hasta que solidifique. Una vez sólidos, desmolda tus jabones caseros y corta en barras. Deja curar al aire libre antes de usar. También puedes usar moldes de figuras, el chiste es dejar volar a tu imaginación para lograr el mejor jabón casero de todos.