Test de Personalidad
Test de personalidad: elige lo primero que observes y te diré si eres bueno brindando consejos
Si te has preguntado si eres una persona que brinda buenos consejos, no te pierdas de atravesar este test de personalidad que es furor en el mundo virtual¿Eres un buen consejero? Si alguna vez te lo has preguntado y no conoces la respuesta, significa que tienes que hacer este test de personalidad. Dicha actividad te permitirá conocerte en mayor profundidad. Lo que tienes que hacer es observar la gráfica y dejarte guiar por tu intuición, para determinar, qué opción llama tu atención. No lo pienses tanto, la respuesta debe ser lo más espontánea posible.
La personalidad
La personalidad es entendida como el conjunto de nuestros aspectos más propios y profundos, allí se ubican nuestros pensamientos, modos de actuar y sentimientos. En su gran mayoría, toda esta información se encuentra inaccesible para nosotros en nuestro día a día, por eso a veces no sabemos los motivos de nuestros sentimientos o de nuestras acciones, pero ahora puedes conocerte un poco más.
Test de personalidad
Un test de personalidad es una herramienta utilizada para el conocimiento profundo de la forma de ser de una persona, funciona porque cuando dejamos fluir nuestros sentidos e intuición, estamos reflejando algo de nuestro mundo interno. Es decir, que sea cual sea tu elección en esta técnica, eso hablará de ti mismo, más de lo que hasta ahora conoces.
Manos
Si fue la elección que llamó tu atención, expresa que por tu personalidad, te inclinas por las conversaciones profundas, por salirte de la zona de confort y por prestar tu oreja para escuchar a los demás. Estos aspectos te convierten en un buen consejero para tus seres queridos, aportando tu punto de vista a lo que te comentan, pero no te olvides de replicarlo en tu propia vida.
Foco
Si esta fue la opción que seleccionaste, indica que, por tu personalidad, eres una persona abierta a la escucha y a la aceptación de las distintas perspectivas humanas. No te tomas los asuntos de otros personales y eso te vuelve un pésimo consejero. No estás para dar consejos, pero si para despertar la propia curiosidad de los demás sobre su propia vida, no intervienes con tus conocimientos personales. Dejas que cada quien realice su camino.